El semen cura el acné

Santiago Villarreal Cuéllar

Es muy común escuchar los adolescentes varones, formular un masaje sobre el rostro, utilizando su propio semen para combatir el acné. También algunas muchachas lo recetan, aunque encuentran la barrera de ¿quién podría donarlo? No sabemos quién fue el inventor de esta teoría, pero se viene manejando desde hace siglos.

El semen es un líquido viscoso, más pesado que el agua, producido por la próstata, no solo de los humanos hombres, sino de todos los animales mamíferos machos. Está compuesto de espermatozoides provenientes de los testículos y plasma seminal que se forma en los mismos testículos, el epidídimo, las vesículas seminales, la próstata, las glándulas de Cowper, las glándulas de Littre y los vasos deferentes. Menos del 10% del volumen de semen originado por una eyaculación está compuesto de espermatozoides y el 90% corresponde al líquido seminal; cada eyaculación puede tener entre 200 y 400 millones de espermatozoides. El semen contiene fructosa, prostaglandinas (E2, A, B), aminoácidos, fosforo, potasio y hormonas; el plasma seminal contiene ácido cítrico, colesterol, fosfolípidos, carnitina, fosfatasa alcalina, calcio, sodio, zinc, potasio y enzimas para la separación de las proteínas. Como puede verse es un fluido muy rico en diferentes elementos, solo que sus mínimas cantidades no representan una gran fuente de químicos como para que pueda originar alguna acción terapéutica.

Ahora, examinemos algunas causas que pueden originar el acné: en ciertos casos puede ser congénito; otros son producidos por infecciones bacterianas; en algunos obedece a un taponamiento de la porosidad de la piel, y se ha demostrado que el estrés también aumenta la proliferación de acné. No se puede generalizar sus causas y cada individuo puede tener una patología distinta. Por la misma razón el tratamiento es diferente para cada paciente y solo en algunos casos puede coincidir con el de otra persona. El semen como tal no posee elementos químicos suficientes para poder afirmar científicamente que puede ser utilizado para tratar o curar el acné, por lo que su prescripción obedece a otro mito sexual.

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